Excursión botánica Punta Lucero

El domingo  12 de junio convocamos la primera  excursión de socios y socias.

El objetivo era Punta Lucero (Bº La Cuesta - Abanto y Zierbena) y su singular flora mediterránea. A pesar de que el día se presentaba tormentoso tras una lluviosa noche, un grupo de 14 personas realizamos el recorrido tras una introducción general sobre la singularidad florística de la zona por parte de Santi Patino.

La primera parada, junto al cercado de la Genista legionensis. Junto al panel informativo, aunque no la vemos, conocemos su diferencia genética con las poblaciones del resto de la cornisa cantábrica (Asturias, Cantabria) por lo que se trataría de un auténtico relicto de épocas muy lejanas.

Proseguimos el camino y paramos un momento a disfrutar del Iris latifolia

Reanudamos el ascenso y continúan presentándosenos rarezas de este humilde monte como el  Marrubium vulgare,  la Leuzea conifera  (cuchara de pastor)

Leuzea conifera

O una especie de dunas como es la Ononis ramosisima  que comprobamos en directo su polinización por abejorros

Era inevitable al parecer escapar de la lluvia, pero no ha sido mucho tiempo el que nos refugiamos en una de las baterias antes de volver al camino entre una cerrada niebla.

Nos vamos entreteniendo con más muestras de la peculiar flora mediterranea de este monte: el  Convulvus lineatus, una pequeña campanilla,  la Althaea hirsuta o malvavisco peludo y el pequeño geranio Erodium malacoides  prosiguen las explicaciones de nuestros guías

Erodium malacoides

Conocemos también el  acebuche Olea europaea, otra auténtica rareza en estas latitudes

Y así poco a poco con decenas de paradas llegamos a las baterias donde Amador Prieto nos habla de la importancia de la niebla que no nos ha abandonado desde el fin de la lluvia.

Y, de pronto, tras haberle otorgado ese protagonismo, la niebla se disipa y el sol empieza a brillar. Vemos también cerca del edificio de acuartelamiento el Convulvus althaeoides (campanilla rosa

Javi Balentzia y Eneko Diaz hacen una incursión por la ladera en dirección la playa de La Arena para comprobar si, tras el incendio sufrido, hay rastro de coscojas  Quercus coccifera. También los algarrobos Ceratonia siliqua han sido fuertemente castigados por las llamas. Resulta increible la presión y la poca atención que recibe este entorno de flora tan singular en todo el país vasco.

Algarrobo  Ceratonia siliqua

Menos paradas en la bajada pero sí vemos la Lonicera etrusca, el junquillo Aphyllanthes monspeliensis, el Trifolium angustifoliam, Iberis carnosa....

Lonicera etrusca

Trifolium angustifoium

Iberis carnosa

La despedida en La Cuesta con una cerveza y pensando en nuevas quedadas, como deben finalizarse las buenas excursiones.

Texto: Begoña Zorrakin

Fotos: Begoña y Marije Arias