Flora singular de la Peña del Moro (Karrantza)

Peña del Moro

En uno de los confines de Bizkaia, sobre la Villa de Lanestosa y siendo sus aristas el límite entre el Valle de Karrantza y la villla cántabra de Ramales de la Victoria, se halla la Peña del Moro. Macizo calizo con unas vistas desde su cumbre que llegan por el norte hasta la costa cantábrica, oteándose la villa pesquera de Santoña y en contrapunto las montañas más elevadas de la zona, con el Castro Valnera como cénit.

Su formación rocosa no es un hecho aislado sino una continuación de las peñas adyacentes del Mazo y Ranero dentro también del Valle de Karranta, los Jorrios en el municipio de Trucíos y hacia el oeste los macizos calizos del Alto Asón que esconden en sus entrañas el mayor sistema kárstico de la península ibérica.

Con una altura modesta, 821m, como no podía ser de otra manera, la flora rupícola es la que se hace patente entre lapiaces y gleras.

Al comienzo de la primavera, cuando Primula veris y Arabis alpina ya nos muestran sus flores, hay una pequeña planta que también lo hace y que destaca por ser ésta su única ubicación en todo Euskal Herria, se trata de Thlaspi caerulescens.

Prímula veris

Thlaspi caerulescens

También en estos comienzos de estación, de forma escasa, aparecen los narcisos Narcissus bulbocodium y más abundante entre las rocas y en los pastizales Globularia nudicaulis.  También son madrugadoras Arenaria grandiflora y Pritzelago alpina. Entre rocas y gleras la llamativa Linaria propinqua de flores amarillas que lucirá durante el resto de la primavera y todo el verano. Y en las zonas de umbría o en las dolinas Valeriana montana, Polygonatum multiflorum y Chrysosplenium oppositifolium.

Linaria propinqua

A principios del mes de mayo las bellas gencianas, Gentiana occidentalis, nos agradan la vista con sus preciosas flores azules. Esta pequeña población del Moro es la única en la comarca de Enkarterri.

Gentiana occidentalis

Y es que en el mes de mayo todo va muy rápido, Hippocrepis comosa, Teucrium pyrenaicum, la pequeña pero vistosa Erinus alpinus, Campanula glomerata, Anthyllis vulneraria e Iberis carnosa, que tiene una hermosa población en su ladera más arenosa, florecen mientras Genista hispanica supsp. occidentalis amarillea las laderas en su parte más baja. Entre los roquedos también, de forma escasa, encontramos a Erysimum gorbeanum y las flores blancas de Saxifraga trifurcata, que es muy abundante por aquí, adornan las peñas por doquier.

Campanula sp.

Iberis carnosa

Genista hispanica supsp. occidentalis

Erysimum gorbeanum

Saxifraga trifurcata

Llegado el mes de junio florecen dos de las joyas botánicas de este monte, entre las peñas unos pocos ejemplares de Anthirrhinum braun-blanquetii que tiene aquí  la única presencia en Bizkaia

Anthirrhinum braun-blanquetii

así como Sideritis ovata que aparece en los suelos arenosos mucho más escaso en nuestra tierra que su pariente Sideritis hyssopifolia que también se halla en las gleras y roquedos del Moro.

Sideritis ovata

En las laderas arenosas también encontramos la curiosa flor de Phyteuma orbiculare o las colgantes de Thalictrum minus

Phyteuma orbiculare

Thalictrum minus

Entre las peñas brillan los pétalos púrpura de la Rosa pendulina y de forma esporádica el espectacular Lilium pyrenaicum luce sus esbeltas flores en este macizo calizo.

Rosa pendulina

Lilium pyrenaicum

 Entre herbazales adivinamos el discreto Thesium pyrenaicum y al esbelto Tragopogon pratensis.

Thesium pyrenaicum

Ya muy avanzado el verano le toca el turno a Teucrium chamaedrys, Origanum vulgare, Sedum sediforme y de forma escasa también aparece Osyris alba con sus frutos ya en esta época.

Teucrium chamaedrys

Osyris alba

Llegando al fin de temporada destacan las flores rosas de Allium lusitanicum, otros dos ajos encontramos entre estas peñas:  Allium sphaerocephalon que ha florecido con anterioridad y Allium ericetorum que lo hará a principios del otoño. En los pastizales la orquídea otoñal Spiranthes spiralis es frecuente y aparece la Merendera montana muy escasa por nuestra zona.

Allium lusitanicum

Allium ericetorum

Merendera montana

Taxus baccata

Las potentillas, Acinos alpinus y Thymus praecox adornan los suelos durante buena parte del año y encaramados en las peñas resisten como equilibristas tejos, aladiernos y pudios.

Además de todo esto en la parte baja de sus laderas encontramos una rica flora que daría para otra historia.

A pesar de no estar bajo el amparo de ninguna figura de protección la Peña del Moro nos ofrece una espléndida y llamativa flora amén de un espectacular paisaje en uno de los extremos de Bizkaia, en el siempre espléndido Valle de Karrantza.

Sergio González Ahedo